El segundo chakra, Swadhistana (en sánscrito) o centro lumbo sacro nace en la columna lumbar y se abre por encima del pubis. El naranja es su color característico.
Si el centro bajo es el representante del cuerpo orgánico, el centro lumbo sacro es el del cuerpo energético. Es el centro distribuidor de la energía y el encargado de su circulación. Está relacionado con los instintos, que son las funciones que mantienen la vida y la salud. Uno de los instintos principales es el sexual pero el centro lumbo sacro representa igualmente el empuje, la pasión y la alegría. Es pues, el centro del movimiento. Al promover la correcta distribución de la energía, el lumbo sacro nos hace sentir bien, nos da alegría, sensualidad, deseos de vivir y de conectar con el mundo que nos rodea.
Comprende la región lumbar de la columna vertebral, la parte inferior del abdomen desde el ombligo hacia abajo, abarcando así los órganos sexuales, las caderas, la pelvis, los cuádriceps, abductores, la parte anterior de las piernas y de los pies. Cuando la energía se estanca en alguna de estas zonas pueden aparecer las lumbalgias, hernias de disco, ciática, problemas en los meniscos internos o pies planos. Igualmente, desde el punto de vista emocional, un estancamiento energético nos lleva a dificultades en la sensualidad, en la capacidad de disfrutar de las cosas de la vida, de manera que solo podemos contactar con los aspectos negativos de la vida. Así pues un “buen” centro lumbo sacro nos permitirá estar en contacto con la felicidad y la alegría de vivir.
¿Como nos movemos en la clase este centro? Pues moviendo las caderas. Si queremos un buen ejemplo de típico movimiento de este centro no hay más que mirar a los brasileños mover sus caderas y observar la cara de felicidad que muestran. Los movimientos pueden ser rápidos o lentos apoyándose en músicas cadenciosas.
Ha estado genial, a ver si el relax dura toda la semana
ResponderEliminary si no ... "be water, my friend" ;)
ResponderEliminarbuen finde Juan